Anoche disfruté un hermoso espectáculo de folklore, pero ese será tema para otro momento. Después de un día agobiante por la temperatura, caída la tarde, salí a dar una vuelta y ¿saben qué? me encontré con mi ciudad como hacía muchísimo no la veía, ¡limpia!. Sí, así como lo leen, siendo domingo la ciudad estaba impecable, sin papeles como suelen verse y así como solemos comentar cuando las cosas están mal, debemos decir lo bueno.
Paso obligado, la estación ¡otra sorpresa! ¡pude ver la entrada a la misma!, el puesto más grande que la cubría, ya no está, quedan a los costados, pero la entrada, totalmente despejada y dos gendarmes parados en el lugar. O sea, mi tarde ha sido feliz y lo quería compartir, quizás algunos no entiendan como alguien puede decir esto por el estado de una ciudad, pero se que no soy la única persona que lo disfruta. Ojalá esto pueda mantenerse y que nuestro partido sea como tantos otros que dan placer visitarlos.
Mañana les contaré sobre el espectáculo del sábado.
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